Al final no pasa nada
¿Les han tocado esos días en los que piensan que todo está mal, que no tienen rumbo ni dirección, que no avanzan, les duele todo el cuerpo, están triste sin razón, desanimados, se enferman, tiene dolores de cabeza y que piensan no vale la pena todo el esfuerzo, tiempo y dinero que han gastado o usado durante varios días, meses o años?
En lo personas, me ha pasado, pero saben que, de todos esos malos ratos, de esas malas rachas, de la falta de pareja, de más ingresos, de restricciones, de sufrimiento, la verdad es que: ¡no pasa nada! Porque al final todo estará bien, el mundo seguirá su rumbo y el que nosotros estemos teniéndonos pena o lastima por situaciones que atravesamos no va a cambiar el que la vida siga su curso.
No permitamos que emociones toxicas, esas trampas nos invadan, esa sensación de tristeza durante dos semanas o más, que interfiere en las actividades laborales, escolares o domesticas se llama: depresión; las causas principalmente son: estrés crónico, problemas económicos, falta de pareja, trabajo insatisfecho, desastres y conflictos.
Datos de la OMS y OPS mencionan que en el mundo hay más de 350 millones de personas con depresión, que la depresión afecta más a la mujer, 1 de cada 5 mujeres que se embaraza sufre depresión post parto y que alrededor del 5% de las personas en el mundo han padecido depresión, así que tranquilos es una sensación que a la mayoría nos ha atacado
Pongámonos a trabajar en eso que nos tiene intranquilos, que muchas veces empieza por un malestar interno, en nuestra mente y alma. Si queremos que nuestra vida cambie debemos de ser disciplinados, hacer ejercicio, comer sanamente (no pensar ¿esto me engorda?, más bien ¿esto me nutre, le hará bien a mi cuerpo?) meditar, leer, ser mas espirituales, filántropos, activarnos, preocuparnos por nuestro alrededor, y sobre todo vivir con desapego a lo material, a las mascotas, a las personas.
Debemos aprender a cerrar círculos, (lo cual es bastante difícil, es decir, salir de nuestra zona de confort) porque si no toda nuestra existencia será en espiral y llegará un punto en que se vuelva vacía, debemos dar las gracias y decir adiós a las cosas, empleos, circunstancias o personas que simplemente ya no mueven nada en nuestra vida, si algo o alguien ya no nos hace feliz o plenos, mejor salir de ahí, no nos conformemos con menos.
Leí un libro, se llama mentes brillantes, mentes entrenadas de Agusto Cury, el cual habla sobre el enorme poder que tenemos en nuestra mente, el cómo podemos transformar nuestro entorno con el pensamiento y actitud, bien dice que en la escuela únicamente nos programan para aprender y memorizar información, se olvidan de educarnos para navegar por las aguas de las emociones que son tan difíciles de controlar.
Por lo tanto, pongámonos a trabajar en nuestra mente y logremos esa madurez emocional, entrenemos nuestro “yo” como gestor de las emociones. Nosotros tenemos el poder de transformar un día lleno de luz, en un día totalmente gris, y viceversa; es complejo, pero iniciemos con pensamientos positivos, buscando un pasatiempo, fortaleciendo nuestras relaciones sociales, meditando, y mejorando nuestra alimentación. Inténtenlo, y verán como instantáneamente vuelve esa chispa de alegría a su vida.
